Getting your Trinity Audio player ready...
|
El director general de Aduanas, Eduardo “Yayo” Sanz Lovatón, afirmó este jueves que aún no es momento para hablar de aspiraciones políticas, sino para trabajar con compromiso y garantizar que el presidente Luis Abinader concluya su gestión con una alta valoración de la ciudadanía.
Durante su participación en el programa Revista 110, que conduce el comunicador Julio Hazim, Sanz Lovatón recalcó que el buen desempeño del Gobierno actual será fundamental para el futuro del oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM) en próximas contiendas electorales.
“No estamos en época de campaña, estamos en época de quedar bien, y yo creo que si Luis Abinader no termina este gobierno con altas calificaciones, ningunos vamos a ganar”, expresó con firmeza.
El también secretario nacional de Finanzas del PRM dijo estar concentrado en sus responsabilidades al frente de la Dirección General de Aduanas, y en fortalecer los resultados del Gobierno, dejando claro que “desde las funciones públicas no se hace campaña”.
Ante preguntas sobre sus propias aspiraciones presidenciales, Sanz Lovatón reconoció que sí las tiene, pero aseguró que el momento de hacerlas oficiales aún no ha llegado:
“A mediados del año que viene nos sentaremos, y ahí pesará el trabajo de cada uno, la solidaridad que todos habremos tenido en la historia de construcción de un partido que se fundó en las escalinatas de un tribunal, cuando nos quitaron el partido con una sentencia”.
Sanz Lovatón también destacó el ambiente de armonía y madurez política que impera dentro del PRM entre los aspirantes a la candidatura presidencial, asegurando que mantiene buenas relaciones con todos sus compañeros.
“En el PRM nadie va a pelear, pues tenemos conciencia histórica; somos los herederos de la lucha de Jacobo Majluta y José Francisco Peña Gómez”, sentenció.
Con estas declaraciones, el funcionario reafirma su lealtad al actual presidente y al proceso institucional del PRM, al tiempo que deja abierta la puerta a una futura candidatura, en un contexto de respeto y unidad partidaria.