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Indotel y ONAPREP firman convenio para modernizar las telecomunicaciones en centros penitenciarios

Indotel y ONAPREP firmaron un convenio para dotar a centros penitenciarios de infraestructura de telecomunicaciones, promoviendo la rehabilitación, la reinserción y el acceso a servicios digitales de internos como parte de un plan de modernización institucional.

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El Indotel y la Oficina Nacional de Apoyo a la Reforma Penitenciaria (ONAPREP) acordaron implementar mejoras tecnológicas en prisiones, con el fin de fortalecer la conectividad y facilitar la rehabilitación y reinserción.
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En un paso importante hacia la modernización del sistema penitenciario, Indotel y ONAPREP firmaron un convenio de colaboración con miras a mejorar las telecomunicaciones en los centros de detención del país. El acuerdo persigue dotar a las cárceles de infraestructura de conectividad adecuada, promoviendo el acceso digital a los internos y facilitando procesos de reinserción, educación y comunicación, como parte de una estrategia de reforma penitenciaria.

El convenio establece como prioridad la instalación de redes seguras de telecomunicaciones, el suministro de equipos necesarios para garantizar la conectividad, así como la implementación de plataformas digitales que permitan al interno mantenerse en contacto con su familia, acceder a servicios educativos y de rehabilitación, y facilitar los trámites de documentación o asistencia cuando la ley así lo requiera. Esta iniciativa busca modernizar las condiciones dentro de los recintos penitenciarios, buscando mejorar la calidad de vida de las personas privadas de libertad y favorecer su reinserción social.

Las autoridades destacaron que, además del aspecto tecnológico, el convenio contempla capacitación técnica al personal encargado de la administración de los centros penitenciarios, de forma que puedan gestionar adecuadamente los sistemas y garantizar un uso seguro y ordenado de la conectividad. Esto contribuirá a transparentar procesos internos, facilitar el seguimiento institucional y asegurar que las mejoras beneficien tanto a internos como al sistema de justicia.

Otro pilar del acuerdo es la inclusión digital como herramienta de rehabilitación: permitir que internos accedan a educación en línea, formación técnica, orientación vocacional y programas de reinserción. Esto representa una apuesta hacia un modelo penitenciario más humano, que reconoce la importancia de ofrecer oportunidades reales de reintegración para quienes cumplen condenas.

La medida también podría contribuir a reducir la reincidencia delictiva, pues al brindar acceso a herramientas de formación y comunicación, se fomenta la reinserción productiva y social. Desde la firma del convenio, ambas instituciones se comprometieron a diseñar un plan de implementación escalonado, priorizando cárceles con mayores deficiencias y garantizando cobertura en distintas provincias del país.

Además, se prevé que la reforma tecnológica incluya protocolos de supervisión, monitoreo y seguridad digital, con el fin de prevenir abusos, evitar comunicaciones con multas ilícitas y mantener un control responsable del uso de estas nuevas plataformas. El objetivo es equilibrar los derechos de los internos con las necesidades de seguridad y orden institucional.

Las autoridades manifestaron que este acuerdo representa un cambio de paradigma: no se trata solo de mejorar la infraestructura física, sino de reconocer que la modernización penitenciaria pasa también por la dignidad, la educación y la posibilidad de reconstrucción social. Indicaron que con este convenio dan un paso hacia un sistema más justo, inclusivo y acorde con los estándares de derechos humanos.

La implementación del convenio se realizará en etapas, con auditorías periódicas, evaluación de resultados y la participación de organizaciones de la sociedad civil que velan por los derechos de los internos. El éxito del proyecto dependerá del compromiso institucional, del seguimiento riguroso y del uso responsable de los recursos.

Con este paso, Indotel y ONAPREP buscan transformar el sistema penitenciario dominicano, garantizando que las personas privadas de libertad tengan acceso a oportunidades reales de rehabilitación y reinserción, y que su estadía en los centros no signifique aislamiento digital, sino posibilidad de formación, comunicación y reinicio social.

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